viernes, 17 de octubre de 2008

NACÍ PARA SALVAR A MI HERMANO

Esto es lo que Javier podrá explicar a su hijos cuando sea mayor. Javier nació el pasado 12 de octubre en Sevilla y fue seleccionado genéticamente entre otros embriones fecundados in-vitro para ser compatible con su hermano Andrés, que sufre una enfermedad genética que le obliga a continuas transfusiones de sangre. Javier es especial porque es el primer niño que nace en España con estas características y porque todo el proceso se ha hecho en nuestro país.
Del cordón umbilical de Javier se podrán extraer células madre compatibles con el tejido de su hermano que serán introducidas en su médula y de esta forma poder producir las células sin el defecto que le provoca su enfermedad. Los padres de Andrés no tenían otra opción, sin éstas células su hijo no sobreviviría y decidieron someterse a un tratamiento y un embarazo muy controlado. con la llegada de su segundo hijo han cumplido dos sueños: tener un segundo hijo sano y poder asegurar la esperanza de vida de su otro hijo más allá de los 35 años.
La Secretaría General de la Conferencia Episcopal Española se ha posicionado frente a este nacimiento diciendo que no ven ético que para que Javier pudiera nacer sano se han desechado otros embriones por no estar sanos o no ser compatibles con su hermano. También afirman que estas prácticas eliminan la dignidad de esos seres humanos ya que todos tienen derecho a la vida, sean o no sanos. Aseguran que no quieren juzgar la actitud de nadie pero que es inadmisible la destrucción de embriones para salvar la vida de otra persona.
La religión católica afirma que la vida es lo más importante, por eso se muestran en contra de los métodos anticonceptivos, el aborto o los nuevos métodos de concepción porque la mayoría incluyen la destrucción o el uso de varios embriones aunque no todos se convertirán en un niño. Por eso la iglesia se muestra en contra de todos los avances médicos que incluyan la experimentación con células madre y no aceptan que muchas vidas se salvan todos los días gracias a la experimentación y no sólo actualmente, la mayoría de las curas actuales se han basado en experimentos que en su época no eran visto con buenos ojos o que nadie conocía. Sería injusto dejar que mueran todos los días miles de personas por no probar todas las vías posibles y viables. Deberíamos preguntarnos a cuantos tratamientos se somete el Papa o los cardenales y que son efectivos gracias a la experimentación y a la utilización de métodos que la iglesia no considera éticos. Por que la vida de Andrés no vale menos que la de cualquier sacerdote o la del mismo Papa y sus padres tienen derecho a ver crecer a su hijo sano y feliz y ahora junto a su hermasno.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Me parece un acto de mucho amor de los padres hacia su hijo enfermo. No entiendo la posición de la Iglesia en este caso ni en otras muchas.

Muy buen post.

Saludos.

MIGUEL

Aspective dijo...

En relación con esta entrada, por favor, visita este post. (te lo agradecería):

http://comeduradetarro.blogspot.com/2008/10/medicamento-lo-ser-vuestro-padre.html.

Muchas gracias