LAS ESPERADAS VACACIONES

Cuando comienza julio parece que todo el mundo está de vacaciones, en los medios de comunicación vemos a todas horas playas, programas de verano, sustituciones de las estrellas mediáticas, niños a todas horas por la calle, fiestas en los pueblos, parece que nadie se acuerda de los que, si tenemos suerte, tendremos una semanilla para escaparnos de la rutina del trabajo. Todo gira alrededor de la playa, la fiesta, el descanso y gastar lo que logramos ahorrar durante el invierno. La verdad es que esta envidia insana del verano no la había tenido hasta que he empezado a trabajar, un consejo, atrasarlo todo lo que podais, jaja. Ahora le encuentro el verdadero sentido al popular dicho de que "viviré de mis padres hasta que pueda vivir de mis hijos" pero de momento trabjo y sigo dependiendo de mis padres y no tengo hijos, ni ganas de tenerlos así que no me queda otra alternativa que seguir trabajando y quejarme en el blog. Al margen de esto, estoy segura de que muchos acabarán odiando la arena de la playa que se mete en todos lados, el sonido de los camareros del chiringuito, los ruidos de la disco de la calle y esos fabulosos días en familia, así que me conformaré pensando que muchos entrarán en septiembre desenado volver a la oficina, la obra o la tienda, que las vacaciones son fabulosas sobre todo antes de que lleguen, imaginando planeando y desenado que lleguen , lo que pasa es que al año siguiente ya no nos acordamos de lso que sufrimos, de lso hartos que acabamos de estar tumbados en la playa, del sabor y olorcillo de la carne de las ferias y de las picaduras de los mosquitos en las terrazas de verano. Yo seguiré consolándome con las penas de los demás, aunque acabe olvidándome de las molestias de las vacaciones y desee con todas las fuerzas que llegue el merecido descanso.