jueves, 21 de septiembre de 2006

ELLA Y EL PÚBLICO DÉBIL


Ayer se produjo el estreno más anunciado del año: Ellas y el sexo débil. La gran nueva serie de Ana Obregón. Inevitablemente tuve que verla, aunque sea para criticarla en mi blog. Lo siento, de verdad que hice el esfuerzo: me senté frente a la tele e intenté no decirme mentalente: "estás viendo una serie en la que Ana Obregón es guionista y su creadora", lo intenté pero me duró muy poco. Es que en la primera escena ella era presidenta del Gobierno y estaba escribiendo una especie de diario en su despacho de la Moncloa, mientras Zapatero la esperaba para el traspaso de poderes. Primero, si eres presidenta tendrás cosas más importantes que hacer que escribir cómo llegaste hasta ahí y lo primero que hace un político cuando le dan el poder es cogerlo, rápidamente, antes de que alguien cambie de idea y no soltarlo nunca, a poder ser. Bueno, a lo que iba: ella era una concesa con mucho título y poca pasta, es decir que el personaje estaba basado de verdad en Ana, pues tiene muchos títulos, incluso el de Bióloga y le sirven de muy poco. Y se casa con uno que tiene mucha pasta y ningún título, vamos un matrimonio de los habituales en la nobleza.
En el 16 aniversario de boda, descubre a su marido con otra y... ya no pude ver más, no, lo sineto pero es que no sólo el argumento era un poco pobre, sino que la interprestación de Ana dejaba mucho que desear. Además las que luego supongo que son sus amigas era cada cual más dispar:
la primera era todo lo opuesto a Ana: poco afortunada en la vida, problemas con el dinero un marido muy poco atractivo, y unos hijos no pijos. Bueno no sé que pintaba este personaje en esta historia, no lo ví hasta averiguarlo, pero la verdad es que era pintoresca. La otra amiga era una sexóloga que había sido monja, pero que lo dejó para acostarse con un tío, peor al final no lo hizo porque no podía, así que aún era virgen a los cuarenta, pero sin embargo era una de las mejores sexólogas del país... sin comentarios. El siguente personaje, y nunca mejor dicho, era una periodista madre soltera enrollada con un torero de fama, que persigue a los famosos.
Creo que ya os he dado suficientes datos para no ver la serie, aún así la podeis ver y juzgar por vosotros mismos, si os gusta siempre podeis pensar que yo me equivocaba o que Ana tiene el don de imnotizar a sus espectadores con sus frases naturales y su gran actuación creible y, por supuesto, con los grandes argumentos y guiones de sus series.

No hay comentarios: