Hoy dan el tercer capítulo de la última temporada de Perdidos y no pienso perdérmelo. Es increíble como he ido cayendo en esta red de fanatismo que últimamente parece que lo envuelve todo. Lo curioso de todo es que con el paso de los años me he dado cuenta que no es la única red en la que he caído y que hacerme fan de bastantes fenómenos es algo que me atrae.
No se si esto es como una adicción: una adicción a hacerte adicta a algo (nunca sustancias poco beneficiosas para la salud): libros, series, películas... he pasado por diversos grados en cada una de ellas y el proceso es casi el mismo. Muchos de vosotros estaréis de acuerdo conmigo y otros pensaréis que nunca os podría pasar algo así, y menos con la edad que tenéis, no cantéis victoria tan pronto, la red es muy fina y cuando quieres darte cuenta ya estás atrapado en ella.
Ser fanático es algo genial, siempre dentro de los límites de la cordura, porque disfrutas intensamente con cada lectura, con cada escena o con cada minuto y sobre todo, esperas con ansia un nuevo dato, un nuevo avance, un nuevo material...
Lo mejor de todo es poder compartir estas adicciones con otros "locos" como tú y discutir sobre temas que a un simple observador le parecerían absurdos. Al fin y al cabo el hombre necesita algo de lo que estar pendiente, una pasión que le alegre los días monótonos y que llene una pequeña parte de su vida de ese espíritu infantil que tanto nos falta a veces.
Pero no penséis que todos somos frikis, hablar durante horas sobre un gol de tacón tampoco es muy sano y nadie se extraña cuando el lunes el único tema de conversación en el trabajo es la forma en la que un balón ha traspasado una línea.
Imagen tomada de: http://www.bibliotecaspublicas.es/bpeteruel/otras2.htm
No se si esto es como una adicción: una adicción a hacerte adicta a algo (nunca sustancias poco beneficiosas para la salud): libros, series, películas... he pasado por diversos grados en cada una de ellas y el proceso es casi el mismo. Muchos de vosotros estaréis de acuerdo conmigo y otros pensaréis que nunca os podría pasar algo así, y menos con la edad que tenéis, no cantéis victoria tan pronto, la red es muy fina y cuando quieres darte cuenta ya estás atrapado en ella.
Ser fanático es algo genial, siempre dentro de los límites de la cordura, porque disfrutas intensamente con cada lectura, con cada escena o con cada minuto y sobre todo, esperas con ansia un nuevo dato, un nuevo avance, un nuevo material...
Lo mejor de todo es poder compartir estas adicciones con otros "locos" como tú y discutir sobre temas que a un simple observador le parecerían absurdos. Al fin y al cabo el hombre necesita algo de lo que estar pendiente, una pasión que le alegre los días monótonos y que llene una pequeña parte de su vida de ese espíritu infantil que tanto nos falta a veces.
Pero no penséis que todos somos frikis, hablar durante horas sobre un gol de tacón tampoco es muy sano y nadie se extraña cuando el lunes el único tema de conversación en el trabajo es la forma en la que un balón ha traspasado una línea.
Imagen tomada de: http://www.bibliotecaspublicas.es/bpeteruel/otras2.htm
