lunes, 29 de diciembre de 2008

2009


Y ya pasó otro año más...
La verdad es que no me entristece que se vaya el 2008, digamos que no ha sido mi mejor año y eso que no me ha pasado nada, será por eso... Nuevas ilusiones, nuevas motivaciones y nuevos retos que cumplir en el nuevo año. Parece increíble lo rápido que pasa el tiempo y cómo se escapan los años sin casi darnos cuenta.
Espero que se os cumplan todos los deseos para el nuevo año y que el 2009 sea un año para recordar y poder decir que fue el mejor de nuestras vidas!!
Disfrutar de la nochevieja, donde intentamos olvidar todo lo malo del año pasado y nos concentramos en las posibilidades del nuevo.
FELIZ 2009 y que sigais visitando mi blog!!

Os regalo una de las mejore imágenes del 2008, según Reuters

domingo, 21 de diciembre de 2008

DINERO, SUERTE Y FELICIDAD


Mañana es el gran día, toda la ilusión, los sueños y los deseos pueden hacerse realidad mañana. Lástima que la culpa de todo esto la tenga el dinero. Mañana, a unos cuantos afortunados dejarán de preocuparle la letra de la hipoteca, los menús económicos o esa gran crisis de la que todo el mundo habla. Mañana unos celebrarán con cava y gritos delante de las cámaras que han dejado de ser pobres o que se han quitado de encima unas cuantas preocupaciones, mientras que otros veremos cómo se puede concentrar toda la alegría a las puertas de una administración de lotería, miles de sonrisas y la envidia de poder estar en el lugar de uno de ellos.
Pese a todo, nadie nos podrá quitar la ilusión que hemos tenido durante los últimos días, las fantasías acerca de qué hacer con tanto dinero o la gente a la que le daríamos una alegría si el número impreso en nuestro décimo fuera el mismo que sale en una bolita.
Y si no nos toca, siempre nos queda el consuelo de repetirnos, hasta que nos nos parezca tan malo, que el dinero no da la felicidad, que nos conformamos con no estar peor de lo que estamos o de pasar otra Navidad junto a los nuestros.
Siempre hay consuelo para todo, pero deberíamos reflexionar más días al año sobre esta gran verdad: el dinero no da la felicidad. Deberíamos dejar a un lado las horas extras por pasar un poco de tiempo al lado de nuestra familia, dejar de ir a las tiendas a comprar eso que a mi vecina le queda tan bien, dejar de medir la felicidad, la alegría y lo buena que es la vida por el número que ponga en nuestro billete.
Dejar de pensar que todo en la vida se compra con dinero. Para que estas navidades no volvais a a querer ser uno de los que abre una botella de cava en la calle, y que os riais con vuestros amigos, familiares de lo buena que es la vida.

FELIZ NAVIDAD A TODOS Y UN POQUITO DE SUERTE PARA MAÑANA

Ahh, muchas gracias al blog de anapedraza, siempre les estoy agradecida por el apoyo que me dan. Pensaré a quien le daré el premio. Yo no hubiera elegido un nombre mejor.

jueves, 4 de diciembre de 2008

UN SUEÑO ROTO

El pasado Octubre, en un partido de la Copa del Rey, Rubén de la Red, jugador de 23 años del Real Madrid, sufrió un desvanecimiento que duró unos minutos y tuvo que ser retirado del campo en una camilla. Ha pasado algo más de un mes de aquellas terribles imágenes que nos hicieron recordar a otros futbolistas que tuvieron peor suerte que él. Sometido a varias pruebas médicas, los especialistas creen que tiene una cardiopatía y que, si se confirma, hacer deporte de forma intensa no es recomendable para su salud. Esta es la triste historia de un chico que soñó toda la vida con ser futbolista y jugar en uno de los mejores clubs del mundo y que cuando empieza a ver el sueño cumplido, se despierta sobresaltado. Es una verdadera pena, ser bueno en algo, que te de una buena vida, un buen sueldo y la posibilidad de poder pasar a la historia (un deseo que no comparte todo el mundo, pero que pocos no hemos tenido alguna vez) y tener que dejarlo por algo con lo que has vivido toda la vida y que ahora, en este preciso momento, en los mejores momentos de tu vida (profesional y personal), te obligan a dejarlo todo.
La mayoría de nosotros jamás cumpliremos nuestros sueños profesionales y personales, al final seremos como la mayoría, tendremos lo que la mayoría y llevaremos una vida normal. Pero cuando el sueño es posible y empieza a hacerse realidad, es más duro ver cómo se escapa entre los dedos. A veces es bueno no conocer tus limitaciones, pensar que todo es posible es precioso, pero bajarte del tren en marcha y rehacer tu vida después de ese gran golpe es aún peor.